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San Pablo no quiso ser menos que Flamengo, que hace un par de semanas cerró la incorporación de Ronaldinho. El club paulista fue por más. Y cerró un acuerdo con Rivaldo, el crack brasileño que brillara en el Mundial 2002. El enganche firmó un contrato por un año, según anunció San Pablo en su página oficial.
A la vez, el club aclara que la transferencia será liberada luego de la autorización del club Bunyodkor, de Uzbekistán, contra el cual Rivaldo
 inicio juicio por salarios no pagados. "Es un gran honor poder jugar para uno de los mejores clubes del mundo", dijo Rivaldo vía Twitter. El futbolista, de 38 años, fue elegido como el mejor del mundo en 1999. Brilló en Deportivo La Coruña, Barcelona y Milan. Luego, había regresado a su país para jugar en el modesto Mogi Mirim, que disputa el campeonato paulista y del cual también es presidente.