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MONTERREY, México - Santos Laguna quiere terminar la obra que comenzó en casa cuando visite este domingo a Monterrey, que está obligado a salir con la victoria, en el partido de “vuelta” de la final del Torneo Apertura 2010 del futbol mexicano.
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El estadio Tecnológico será el escenario de los últimos 90 minutos, o quizá un poco más, de esta campaña, los cuales serán dirigidos por Armando Archundia, quien dirá adiós al arbitraje profesional en duelo.ventaja 3-2 a los de la “Comarca Lagunera”, que demostraron tener los argumentos necesarios, pero sobre todo el “hambre” para levantar el título.

La delantera respondió de la misma forma en que venía trabajando, ya que el ecuatoriano Christian Benítez y el colombiano Carlos Quintero se mantuvieron en el mismo nivel y además tuvieron el apoyo de Iván Estrada, quien ofreció una actuación memorable, no solo por el gol que marcó, sino también por el servicio para el segundo tanto.

El problema que no debe tener muy tranquilo al técnico argentino Rubén Omar Romano es su cuadro bajo, que una vez más enseñó serias faltas de concentración y por momentos exceso de confianza, lo cual les costó una de las dos anotaciones de Rayados.

Ante esta situación, debe existir un examen exhaustivo y soluciones inmediatas, ya que la obligación de su rival es ir al frente, por lo que la presión será mucho más intensa de lo que fue en el primer capítulo. La buena noticia es que ya podrá contar con el panameño Felipe Baloy, quien seguramente le dará mayor solidez.

Por su parte, Rayados no hizo un mal partido, durante muchos momentos lo dominó y la experiencia del cuerpo técnico y del plantel quedó de manifiesto, sin embargo, no fue suficiente para mantener a raya a una ofensiva que no perdonó las ocasiones creadas.

Sin ser netamente defensivo, el cuadro regio, que tendrá la baja de Ricardo Osorio por lesión, tampoco se volcó con todo al frente, actitud que deberán modificar ante la necesidad que tienen de salir con la victoria para ir a tiempo extra o levantar el título.

Dicha situación obliga a su sector defensivo a tener una mayor aplicación, ya que los espacios largos que podrá tener la ofensiva de Santos serán mayores mientras los minutos transcurran y el marcador se mantenga.

Este es el momento para que Monterrey ponga de manifiesto de manera total esa experiencia, pero sobre todo ese potencial ofensivo con el que cuenta.


Un partido de “ida” sumamente peleado, con calidad, entrega y algunas fallas defensivas le dieron rumbo y la