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Roy Justiniano
Fundador / Editor
jueves, 7 de abril de 2011
11:32 a. m. | 
Escrito por:
Roy Justiniano |
La derrota sufrida la noche anterior frente a los Jazz de Utah iba a pasar factura en la moral de juego de los Lakers de Los Ángeles, que llegaron al ORACLE Arena para ver como tampoco podían superar el mejor juego ofensivo de los Warriors de Golden State y perdieron por 95-87.
La derrota, tercera consecutiva para los Lakers (55-23), dejó a los actuales campeones de la NBA sin opción a seguir en la lucha por la mejor marca de la liga, que ahora ya la tienen asegurada los Spurs de San Antonio (60-19).
Además tampoco ya van a tener la oportunidad de volver a conseguir 60 triunfos bajo la dirección del entrenador Phil Jackson, en lo que será su última temporada como entrenador.
A la falta de motivación que tuvieron los Lakers tampoco le ayudó la inspiración encestadora de los Warriors y su espíritu de lucha para conseguir su primera victoria en su campo ante el equipo angelino desde el 14 de diciembre del 2007 después de haber perdido 12 encuentros consecutivos.
El escolta Monta Ellis fue el máximo encestador del equipo al conseguir 26 puntos, mientras que el ala-pívot David Lee logró un doble-doble de 22 tantos y 17 rebotes para imponer su presencia bajo los aros y ganarles el duelo a los hombres altos de los Lakers, con la excepción del pívot Andrew Bynum.
El base Stephen Curry también iba a realizar una gran labor en la dirección del juego de los Warriors para concluir el partido con 20 puntos, seis rebotes y cinco asistencias, que ayudaron a su equipo a tener una ventaja de hasta 19 tantos en el marcador y conseguir el tercer triunfo consecutivo.
Las últimas victorias de los Warriors (35-44) las han conseguido ante equipos ganadores y clasificados para la fase final como son los Mavericks de Dallas, los Trail Blazers de Portland y Lakers, demostrando que alcanzado su mejor momento de juego, pero cuando ya están eliminados de la fase final.
Los Lakers salieron al campo después que los Spurs ya tenían prácticamente asegurado el triunfo ante los Kings de Sacramento (124-92) y asumieron que la lucha por la mejor marca de la liga había llegado a su final.
De ahí, que los Warriors fueron siempre el equipo que tuvo mayor motivación en el campo y le diesen el placer a los sufridos seguidores del área de la Bahía de San Francisco de ver cumplido su anhelado y esperado sueño de "ganar a los Lakers" (Beat LA!).
Aunque también se dieron cita en el campo los siempre fieles seguidores del escolta estrella Kobe Bryant, que les correspondió como líder encestador de los Lakers al conseguir 25 puntos, incluidos 10 en el cuarto periodo, cuando los campeones de liga se pusieron a sólo ocho tantos abajo en el marcador.
Pero el esfuerzo individual de Bryant no iba a ser suficiente para hacer el milagro y superar a un rival que estaba convencido de la victoria.
Tampoco el ala-pívot español Pau Gasol, que confirmó que no tiene ningún problema grave en las rodilla derecha, lesionada en el partido ante los Jazz, pudo cambiar la historia del partido con los 18 tantos que aportó para ser el segundo máximo encestador del equipo, pero sin que pudiese imponer su presencia bajo los aros.
Gasol jugó 27 minutos para anotar 7 de 11 tiros de campo y 4-8 desde la línea de personal, además de capturar siete rebotes.
Mientras que Bynum fue el líder en el juego bajo los aros para los Lakers al conseguir un doble-doble de 13 puntos, 17 rebotes, tres tapones y un robo.
Pero la imagen que daban los Lakers en el campo no era de equipo ganador y mucho menos de campeón defensor del título de liga, de ahí que el propio Bryant se mostró "disgustado" con sus compañeros a los que trato de motivar, pero al final lo que hizo fue recriminarles sus fallo, sin conseguir nada a cambio.
Los Lakers estuvieron en constante confusión, sin que su entrenador Phil Jackson tampoco llegase al partido lleno de entusiasmo y energía para tratar de rectificar cuando cometían error tras error.
Bryant fue el encargado de hacerles ver a sus compañeros los fallos y pedirles que se centrasen en el juego, pero al final tampoco pudo conseguirlo y sin su "milagro" individual, la derrota, aunque inesperada, era también la lógica de otra noche para el olvido, de los Lakers, y de celebración para los Warriors.
http://www.marca.com/2011/04/07/baloncesto/nba/1302159091.html
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